Qué es el valor residual

valor residual

Muchas personas que realizan su trabajo como autónomos, así como otras que lo hacen por medio de sociedades mercantiles, suelen tener dudas acerca de ciertos conceptos contables que pueden resultar, en un inicio, complicados.

En esta ocación, explicaremos que es el valor residual y que implicaciones tiene, o puede tener, en nuestro negocio.

¿Qué es el valor residual y cómo puedo calcularlo?

El valor residual es un concepto utilizado en contabilidad que hace referencia al precio o valor que tiene un activo después de que se agote su vida útil. Como sabemos, los bienes que tenemos en nuestros activos se deben de amortizar, pues su uso hacen que pierdan valor.

Si hablamos del caso, de por ejemplo, un vehículo que usamos para transportar nuestros productos, resulta evidente que este bien (que es un activo) va a perder valor por el simple uso y paso del tiempo. No cuesta lo mismo cuando lo compramos que cuando pasan muchos años y hemos recorrido con él muchos kilómetros.

El valor residual, por tanto, será ese valor que tendrá el vehículo al final de su vita útil (cuando este amortizado) que además nos indicará el precio por el cual lo podemos vender.

Cálculo del valor residual

Para conocer el valor residual hay que tener en cuenta las amortizaciones. Supongamos que el vehículo que decíamos antes cuesta 50.000 euros cuando lo compramos. En nuestra contabilidad ese año podremos los 50.000 en el activo.

Con el paso del tiempo (varios años), lo iremos amortizando con lo cual, al final de la vida útil (contable) del mismo, tendremos en el activo un valor menor que cuando lo compramos. Este valor dependerá de como amorticemos el bien.

Supongamos que el valor transcurridos los años y finalizada la vida útil es 10.000 euros. Para saber el valor residual tendremos que descontarle a este bien los gastos de venta que podrá tener venderlo (gastos con la DGT, notario, etc.). Ese valor resultante es el valor residual.

¿En qué me afecta el valor residual?

Como vemos, el valor residual nos afectará siempre y cuando vayamos a vender el bien en cuestión. Si tenemos unos muebles en nuestra oficina, que se amortizan, llegan a su vida útil, pero luego simplemente cuando no se puedan seguir usando desechamos, el valor residual no tendrá interés porque no se venderá.

No obstante, puede ser interesante de tener en cuenta el valor residual cuando tengamos un bien en el activo que luego vamos a revender de forma segura. Supongamos el caso de una maquinaria que el proveedor nos comprará después de un tiempo.

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