Hay facturas y facturas. Si eres autónomo o empresario, seguro que lo sabes muy bien pues, probablemente, te darán bastante trabajo.
Uno de los conceptos más complejos a los que tienes que enfrentarte es el de las retenciones puesto que la Agencia Tributaria te obliga a que actúes como recaudador.
Y no puedes equivocarte o luego tendrás que pagar con recargo. Por este motivo, si quieres tener la tranquilidad de saber que lo estás haciendo bien, cada vez que tengas que emitir una factura con retención, hazlo con Factura2.
- 1. Haz una factura con retención de irpf que no te complique la vida
- 2. No te la juegues al redactar tus facturas con retención
Haz una factura con retención de irpf que no te complique la vida
Una retención es una cantidad de dinero que el pagador debe descontar de la factura para, más adelante, abonarla a las instituciones públicas pertinentes.
Es decir que, por ejemplo, tú tendrías que hacerlo cuando compras o recibes un servicio de un proveedor y tus clientes deberían hacerlo cuando hacen lo propio contigo.
Más adelante, en concreto, cada tres meses, ya se trate del IVA, el IRPF o cualquier otro impuesto similar, habrá que pagar la cifra que corresponda a la Agencia Tributaria mediante una declaración.
Hacer una factura con retención a mano no es imposible, pero te llevará su tiempo. Siempre es mejor contar con un software que, como Factura2, permita confeccionarlas detalladamente sin apenas esfuerzo para así poder tener lista la que necesitas en pocos minutos.
Además, ganarás la tranquilidad de saber que la has hecho bien y que no te dará problemas en el futuro.
No te la juegues al redactar tus facturas con retención
No serías el primero al que, después de haber emitido sus facturas con retención y, pasado un tiempo creyendo que todo iba bien, ha recibido una carta de la Agencia Tributaria diciendo que el importe era incorrecto y que ahora tiene que pagar lo adeudado y con un buen porcentaje de recargo.
Sin duda, esta es una pesadilla que todo emprendedor tiene, sobre todo, en sus inicios, es decir, en esos momentos en los que la economía de la empresa pende de un hilo.
Así que, si quieres evitar este tipo de imprevistos, empieza a utilizar ya Factura2.