Como sabemos, el impuesto al valor añadido (IVA) es uno de los más importantes en las actividades de cualquier autónomo o sociedad tanto por su coste como por su gestión.
Hay muchas personas que no conocen muy bien que son las exenciones o como funcionan, en parte porque en sus actividades puede que no existan operaciones exentas. Por eso, a continuación, aclararemos las dudas más comunes sobre este tema.
- 1. ¿En qué consiste la execión del IVA?
- 1.1. ¿Qué implica que algo esté exento?
- 2. Algunos ejemplos de execiones de IVA
¿En qué consiste la execión del IVA?
La exención del IVA, así como sucede con otros impuestos, es una situación en la cual no se debe de cobrar (o pagar) nada en concepto de IVA porque la propia Ley así lo establece.
No hay que confundir la exención con la no sujeción; una operación no sujeta es aquella que directamente no está contemplada como parte del impuesto, por no ser algo que la Ley entienda que puede estar relacionado con el IVA.
Por su parte, la exención, es algo que estando sujeto al impuesto el legislador piensa que es mejor que no pague. Normalmente esto sucede con actividades que se prefiere que no paguen el impuesto para beneficiar a los consumidores.
¿Qué implica que algo esté exento?
Si realizamos una operación que está exenta, sea una venta del algún bien o un servicio, no debemos de cobrar el IVA. No obstante, debemos de emitir una factura exenta de IVA, donde se debe de constar cual es la exención que usamos para no cobrar el IVA.
No debemos olvidar que, incluso estando exento lo que hacemos, sí tenemos que hacer las retenciones de IRPF en su caso y cumplir todas las obligaciones formales que tienen todas las demás empresas o autónomos.
Algunos ejemplos de execiones de IVA
El tema de las exenciones es algo complejo porque en la Ley que regula el IVA hay muchísimas. Vamos a poner algunos ejemplos importantes de exenciones pero, ante cualquier duda, es mejor consultar directamente el artículo 20 de la Ley 37/1992 (Ley del IVA)
Los servicios de hospitalización y ambulancias, por ejemplo, están exentos de pagar ningún tipo de IVA. Como vemos, este es un claro ejemplo de beneficiar al cliente, o paciente, para que el servicio sea más económico.
Asimismo, los servicios que dan los médicos en materia de prevención y tratamiento de enfermedades, siempre que sean profesionales titulados o acreditados. Esto no incluye la acupuntura y cirugía estética.
Los profesores particulares, que por ejemplo den clases de idiomas o de otras asignaturas a estudiantes, tampoco deben de cobrar IVA por estar esta actividad exenta.
Otras actividades u operaciones exentas son: las operaciones de seguro, reaseguro y capitalización, los anticipos de cobro de factoring, la venta de terrenos rústicos y las segundas y subsiguientes ventas de edificios.